Que Hizo Jesus De Diferente En Esta Cena

¡La cena que cambió la historia de la humanidad! Hoy hablaremos de uno de los momentos más significativos de la vida de Jesús: la última cena.

¿Qué hizo Jesús de diferente en esta cena? Algunos de los aspectos más destacados incluyen el lavado de pies de los discípulos, la institución de la Eucaristía y la traición de Judas Iscariote.

Pero profundizando en ellos, entendemos que hay mucho más detrás de estos actos aparentemente simples. En el lavado de pies, Jesús nos enseña la humildad y el servicio a los demás, un ejemplo que los discípulos deberían seguir.

La institución de la Eucaristía, por otro lado, es el inicio de uno de los sacramentos centrales de la fe cristiana, en la cual se conmemora el sacrificio de Jesús en la cruz.

Y finalmente, la traición de Judas representa una de las peores traiciones de la historia, pero también es un recordatorio de que incluso aquellos más cercanos a Jesús pueden fallar.

En resumen, la última cena de Jesús fue un momento clave en la historia y en la fe cristiana. Los actos de humildad, servicio, sacrificio y compasión que se manifestaron en esa noche siguen resonando a través de los siglos, inspirándonos a todos a seguir el ejemplo de Jesús.

Jesús hizo varias cosas diferentes en la Última Cena, que es una cena especial que compartió con sus discípulos antes de ser arrestado y crucificado. Algunas de las cosas que hizo Jesús en esta cena incluyen:

1. Instituyó la Eucaristía: Durante la cena, Jesús tomó pan y vino, los bendijo y los compartió con sus discípulos, diciéndoles que el pan y el vino se convertirían simbólicamente en su cuerpo y su sangre. Esto se convirtió en la base de la celebración de la Santa Misa en la iglesia católica.

2. Anunció su traición: Jesús les dijo a sus discípulos que uno de ellos lo traicionaría, lo que causó gran conmoción y tristeza entre ellos.

3. Lavó los pies de sus discípulos: Como un acto de humildad y servicio, Jesús lavó los pies de sus discípulos, una tarea que normalmente realizaba un sirviente o esclavo.

4. Instó a la unidad y el amor: Jesús les habló a sus discípulos sobre la importancia de amarse y servirse mutuamente, y enfatizó la necesidad de la unidad entre ellos.

En resumen, Jesús hizo varias cosas diferentes en la Última Cena, que fueron significativas en su enseñanza y en la historia del cristianismo.

¿Sabes qué hizo Jesús en su última cena? ¡Sorprendente acto te asombrará!

Queridos hermanos y hermanas,

Hoy quiero compartir con ustedes un hecho sorprendente que sucedió durante la última cena de nuestro amado Jesús.

Mientras celebraba la cena con sus discípulos, Jesús tomó el pan y lo bendijo. Luego lo partió y se lo dio a sus discípulos, diciéndoles: «Tomen, esto es mi cuerpo».

Y luego, tomó una copa de vino y dijo: «Esto es mi sangre, la sangre del nuevo y eterno pacto, que será derramada por muchos por el perdón de los pecados».

Este acto de Jesús es conocido como la institución de la Eucaristía, el sacramento en el que Jesús se hace presente en el pan y el vino consagrados. Es un misterio de fe que nos une a Jesús y a su sacrificio en la cruz.

La última cena de Jesús es un momento de profundo significado para los cristianos. Es un recordatorio de la entrega total de Jesús por nosotros y una llamada a seguir su ejemplo de sacrificio y amor por el prójimo.

Que la celebración de la Eucaristía nos renueve en nuestra fe y en nuestro compromiso de seguir a Jesús en nuestras vidas.

Bendiciones,

Tu sacerdote de confianza

Que ver además en Jesucristo:

 

Jesús mostró compasión divina en su traición en una noche extrema.

La noche en que Jesús fue traicionado por uno de sus discípulos, fue una de las más oscuras y dolorosas de su vida terrenal. Pero, a pesar del dolor y la angustia que debió sentir en ese momento, Jesús demostró una compasión y amor divinos hacia aquel que lo había traicionado.

En el jardín de Getsemaní, justo antes de ser entregado a las autoridades, Jesús se acercó a su discípulo Judas y le dirigió estas palabras: «Amigo, ¿a qué vienes?» (Mateo 26:50). Jesús no le juzgó ni le condenó, sino que le habló con ternura y amor, sabiendo que su amigo estaba a punto de cometer un acto terrible.

A pesar de que Jesús sabía que Judas lo traicionaría, no intentó detenerlo ni alejarlo de sí. En lugar de ello, permitió que Judas hiciera lo que debía hacer, sabiendo que era parte del plan divino para la redención de la humanidad. Y, a pesar del dolor que debió sentir al ser traicionado por alguien en quien había depositado su confianza, Jesús mantuvo la calma y la compasión, mostrando así su divinidad y su amor incondicional hacia todos sus hijos.

En esta noche extrema, Jesús nos enseñó que la compasión y el amor divinos son más fuertes que cualquier pecado o traición. Y nos mostró el camino hacia la salvación, el perdón y la paz con Dios.

Jesús transformó una simple cena en un acto de amor eterno.

Una de las mayores enseñanzas de Jesús fue demostrar el amor incondicional que debemos tener hacia nuestros hermanos. Y aunque lo hizo en muchas ocasiones, una de las más recordadas es la que tuvo lugar durante la Última Cena.

Lo que comenzó como una cena más, se convirtió en un acto de amor eterno cuando Jesús decidió compartir su cuerpo y su sangre con sus discípulos. Tomando el pan y el vino, lo convirtió en su cuerpo y su sangre, y dijo a sus seguidores que hicieran lo mismo en su memoria.

Fue así que instituyó el sacramento de la Eucaristía, un acto de amor y unión entre los creyentes y Dios. Y a través de este ritual, el recuerdo de su sacrificio y amor por la humanidad se mantiene vivo y presente.

Por eso, cada vez que celebramos la Eucaristía, estamos recordando el momento en que Jesús transformó una simple cena en un acto de amor eterno. Y nos unimos en comunión con él y con nuestros hermanos, con la certeza de que su amor nunca nos dejará desamparados.

En conclusión, Jesús hizo algo verdaderamente diferente en esta cena que impactó profundamente en la historia de la humanidad. Su amor por la humanidad y su sacrificio en la cruz son la razón por la cual podemos disfrutar de la vida eterna. ¡Así que nunca olvides el gran amor que Jesús nos ha demostrado!

¡Despídete de este magnífico artículo y vive agradecido por el gran amor de Jesús!